Feliciano me adora y yo aborrezco;
Lisardo me aborrece y yo le adoro;
por quien no me apetece ingrato, lloro,
y al que me llora tierno, no apetezco.
A quien más me desdora, el alma ofrezco;
a quien me ofrece víctimas, desdoro;
desprecio al que enriquece mi decoro,
y al que le hace desprecios, enriquezco.
Si con mi ofensa al uno reconvengo,
me reconviene el otro a mí, ofendido;
y a padecer de todos modos vengo,
pues ambos atormentan mi sentido:
aquéste, con pedir lo que no tengo;
y aquél, con no tener lo que le pido.
SoR jUANA iNÉS DE LA CRUZ, Poeta y monja nacida hace una pila de años, admirable por donde se la mire.
cuando ser mina y saber del amor estaba prohibido
domingo, 14 de junio de 2009
Sor Juana de la Cruz, Cybergirl
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1 comentario:
Julio Fernandez Pelaez ha escrito a las 12:44 del 11 de junio en Facebook
Ese poema es uno de los mejores de SOr j7una, y de la poesia mundial , es genial
y a quien no le pasa?
aguantes las monjas mexicanas cachondas.
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